Planificación, Reinvención y Tecnología: 3 claves de la Logística Elástica.
CONOZCA EN DETALLE EN QUÉ CONSISTE LA LOGÍSTICA ELÁSTICA, CUÁLES SON SUS HERRAMIENTAS PRINCIPALES Y QUÉ NUEVAS TECNOLOGÍAS LA PUEDEN COMPLEMENTAR.
Por complejo que parezca, el concepto de logística elástica se resume en la necesidad de alinear los procesos logísticos con las nuevas demandas que surgen a diario en la cadena de suministro. Si bien en la teoría se puede simplificar, lo cierto es que concebir e implementar una estrategia operativa con la logística elástica como principio no es tarea sencilla.
A diario, el dinamismo propio de los mercados propone nuevos retos que implican el diseño de soluciones en tiempo real que, más allá agilizar los procesos, también representen rentabilidad y den satisfacción al cliente. Por esto, la logística elástica entendida en función de la planificación y la reinvención puede resultar siendo la estrategia más eficiente para adaptarse a las demandas de un mundo cambiante.
Teniendo en cuenta lo anterior, Catálogo de Logística le explica en detalle en qué consiste la logística elástica, cuáles son sus herramientas principales y qué nuevas tecnologías la pueden complementar.
Más allá del concepto
La logística elástica se refiere al desarrollo de capacidades para responder a las demandas específicas que surgen en medio de una operación logística de cualquier naturaleza. Esta flexibilidad permite un mejor control de costos, aumenta los canales de distribución, da prioridad a las entregas, facilita la gestión de bodega y termina por definir el curso de las operaciones cotidianas. Para que sea verdaderamente eficiente, una estrategia de logística elástica exige el empleo de plataformas basadas en la nube que, además de facilitar el control del crecimiento o las contracciones, permitan hacer ajustes sobre la marcha y dar soporte a las operaciones.
Aunque parezca difícil, pensar en logística elástica es pensar en planificación y en una adecuada anticipación a la demanda variable. Esto es posible mediante el análisis de datos recopilados desde distintas fuentes internas o externas que bien pueden ir desde los inventarios del almacén, el registro de despachos, la trazabilidad de las mercancías y, por supuesto, la retroalimentación de los proveedores y clientes. En términos generales, se logra a partir de una óptima gestión de la información a lo largo y ancho de la cadena de suministro.
Establecer labores y tareas, asignar el recurso humano idóneo para cada una, optimizar las operaciones de carga y entrega, mejorar la experiencia del cliente y obtener retribución en los ingresos son tan solo algunos de los beneficios implícitos que vienen con una estrategia exitosa de logística elástica que, para su consecución, requiere una escucha atenta de las necesidades del mercado y, evidentemente, de un uso eficiente de la tecnología disponible.
ADOPCIÓN DE TECNOLOGÍAS
Como en cualquier otro ámbito, la tecnología también altera sustancialmente a las operaciones logísticas y, lejos del determinismo tecnológico, su adopción y/o adaptación no es negociable.
En definitiva, la tecnología cumple con un papel muy importante en la elasticidad en la cadena de suministro, por eso, no deben ser extraños conceptos como inteligencia artificial, aprendizaje automático o machine learning, automatización y conectividad de IoT, pues es su implementación lo que facilita que una cadena de suministro funcione dentro de nuevos parámetros antes insospechados. Lo cierto es que los beneficios de la logística elástica son posibles únicamente mediante el uso consciente y efectivo de este tipo de soluciones tecnológicas.
¿Pero cuáles soluciones son las idóneas? Evidentemente, todo depende de la naturaleza del operador logístico, pero entre las indispensables se cuentan el uso de un buen software de gestión de la cadena de suministro que permita una mejor visibilidad en tiempo real de la demanda de los clientes; el empleo de sensores en contenedores y paquetes que faciliten la trazabilidad de las mercancías y aporten datos útiles para la predicción de situaciones venideras; y soluciones de automatización y robótica que –en función de la demanda– hagan posible una óptima gestión de las mercancías en el almacén.
NUEVAS FILOSOFÍAS DE OPERACIÓN
Por novedoso e imprescindible que parezca, el concepto de ‘justo a tiempo’ ya no es suficiente cuando de elasticidad se trata. La logística elástica demanda muchos más esfuerzos y la incorporación de nuevos conceptos y filosofías de operación que permitan responder de la mejor manera a lo imprevisible que puede llegar a ser la demanda.
Para lo anterior, conceptos como el de Fabricación de Respuesta Rápida o Quick Response
